Enormes barreras cerraban todas las calles adyacentes y nosotros arriba y abajo, la gente amontonada a la puerta de los bares viendo las carreras por televisión y de fondo el griterio atronador de la turbamulta, como en un circo romano. ¿Nos vamos ya? nos dijimos. Entonces yo pensé, si frente a esa salida hay varios camaras de televisión y fotografos alguien tendra que salir. Unos minutos de espera y de pronto...
Suena un cohete, el griterio de la gente llega al paroxismo, la puerta se abre y los fotografos corren calle abajo. Yo noto un tirón al cuello, y Josep y la camara desaparecen en la lejania. No los volví a encontrar hasta un rato despues.
Los siguientes minutos fueron de autentica locura dificil de describir. Por partes iguales euforia, felicidad, cabreo, tensión, nervios..., supongo que era como encontrarse en la entrada de vestuarios de un Madrid-Barça al final del partido.
Hace unos cinco o seis años, estábamos en Siena este servidor y su currita. Y resultó que la bella fachada del Duomo estaba tapada por un toldo, por limpieza de la piedra. Eso sí: un dibujo bastante ajustado reproducía los primores góticos ocultos. Segunda contrariedad: faltaba casi una hora para que se franqueara la entrada a los turistas. Teníamos el tiempo justo y, ante semejante desastre, nos la jugamos y llamamos a la puerta del conserje (esa que se ve en tu foto al pie de la espigada torre). Le hicimos ver nuestra enorme frustración y el mozo nos ofreció una salida piadosa: nos dejaba pasar un ratito pero "soltanto per pregare" (sólo para rezar). Ahí que se me removieron las entretelas de cristiano viejo y que pa dentro, que la ocasión la pintan calva y ver la joya bien vale una misa (en realidad nos tuvimos que tragar un bautizo o algo así, que de exorcismos y esas cosas no entiendo ni un res). Nos sentamos en un banco de la nave central y quedamos sobrecogidos con la belleza del templo, sobremanera la taracea de mosaico del suelo, un prodigio que nunca había visto en semejante esplendor. Más sosegados, pues que mi curri que me guiña uno de sus preciosos ojos verde-grises, mientras despliega una mirada circular, como diciéndome: "Qué, tronqui, ¿nos animamos a dar un garbeo por la iglesia?". Vacile un momento pero prevaleció el escrúpulo de no engañar al celador y no nos movimos del banco de madera. Y menos mal: al poco, sentimos un crujido en sordina y la puntiaguda nariz toscana del portiere que nos junaba disimuladamente desde el dintel de la puerta. Debió de satisfacerle nuestra piadosa actitud (mira que no moverse del banco con aquel esplendor rodeándonos..., soltanto per pregare...). Lo cierto es que me sonrió en la distancia y yo, por corresponderle, junté las manos y puse los ojos en blanco mirando las maravillosas bóvedas de crucería. Ojos así -pensaría- sólo se ven en los cuadros de Rivera o en los de El Greco. Sí, aún quedaba algún español devoto. Pero, ya digo: mereció la pena este poco honorable acto de hipocresía, pues me permitió ver el Duomo de Siena. Y de eso se trataba. Salute.
Hace veintitantos años que estuve, nos suelo recordar demasiados detalles del interior de tantas iglesias como en esta vida he visitado (no para orar, vive dios), pero esas columnas bicolores y sobre todo ese pavimento, no se me ha borrado de mi maltrecha memoria, por algo sera. Tal vez no hicisteis la visita que os hubiera gustado, pero esa casualidad la hizo especial. Salute caro.
Desde luego una fiesta por todo lo alto. Has sabido mostrar el tumulto y el ambiente de la calle y la plaza en todo su esplendor. Un lugar para tener en cuenta y una fiesta para no olvidar. Un abrazo
La primera fotografía es, cuando menos, muy original y me gusta, entre otras cosas por lo que tiene de transgresora. El resto de reportaje lo he leído en su conjunto y me ha gustado el modo en que después de la turbamulta lo vas serenando progresivamente hasta la calma que representa esa dama de verde. Un abrazo,
Otra de las ciudades que tengo in mente visitar en cuanto pueda. Italia entera bien valen varias misas, verdad? Dicho con amor a nuestro ateo amigo, que me tiene del todo abandonada. La fiesta, terroríficamente fantástica. Y las fotos espléndidas, como siempre. Besos, querido.
Nuestro amigo es esa rara avis que aparece y desaparece anarquicamente, libre, y que su imprevisibilidad es su atractivo. En cuanto a Italia vale mucho, pero ¿varias misas? mucho me pedís. Dejemoslo en una misa cantada. Y la fiesta aun no ha acabado, ya veras. Un besazo, amiga mia.
Tras unos dias de auséncia, intento ponerme a marchas forzadas al dia. Increibles y maravillosos los reportajes toscanos nos estas mostrando. Este último sobre la fiesta del Palio es difícil de describir si no lo has vivido en directo como tu. Seguiré atento a las próximas visitas. Una abraçada
Hombre Josep, se te echaba de menos por estos pagos. Espero que hayas pasado unos agradables dias y vengas cargado de cosas que enseñarnos. Una abraçada, amic.
Una fiesta multitudinaria que has recogido tanto en unas buenas tomas generales como en otras mucho mas cercanas y personales. Enhorabuena, David. Seguro que lo pasasteis en grande. Un abrazo.
Estic flipant! Quin treball fotogràfic!!! Jo ahí m'havera ofegat...estava a tope!!!
Si...ja sé que no són hores de comentar...les 4 de la matinada, però és que m'he fet un té després de sopar i no hi ha manera! I també estic tota la setmana en una perreria que no m'aguante...serà la edat... ;)
Sólo se me ocurre decir esto:
ResponderEliminarJODEEERRRRRR!!!!!
QUÉ GENTÍOOOOOOOOO!!!!!
Un abrazo
Lo dicho, como un circo romano, imaginalos todos gritando como posesos a la vez. Abrazos.
EliminarHace unos cinco o seis años, estábamos en Siena este servidor y su currita. Y resultó que la bella fachada del Duomo estaba tapada por un toldo, por limpieza de la piedra. Eso sí: un dibujo bastante ajustado reproducía los primores góticos ocultos. Segunda contrariedad: faltaba casi una hora para que se franqueara la entrada a los turistas. Teníamos el tiempo justo y, ante semejante desastre, nos la jugamos y llamamos a la puerta del conserje (esa que se ve en tu foto al pie de la espigada torre). Le hicimos ver nuestra enorme frustración y el mozo nos ofreció una salida piadosa: nos dejaba pasar un ratito pero "soltanto per pregare" (sólo para rezar). Ahí que se me removieron las entretelas de cristiano viejo y que pa dentro, que la ocasión la pintan calva y ver la joya bien vale una misa (en realidad nos tuvimos que tragar un bautizo o algo así, que de exorcismos y esas cosas no entiendo ni un res).
ResponderEliminarNos sentamos en un banco de la nave central y quedamos sobrecogidos con la belleza del templo, sobremanera la taracea de mosaico del suelo, un prodigio que nunca había visto en semejante esplendor.
Más sosegados, pues que mi curri que me guiña uno de sus preciosos ojos verde-grises, mientras despliega una mirada circular, como diciéndome: "Qué, tronqui, ¿nos animamos a dar un garbeo por la iglesia?". Vacile un momento pero prevaleció el escrúpulo de no engañar al celador y no nos movimos del banco de madera. Y menos mal: al poco, sentimos un crujido en sordina y la puntiaguda nariz toscana del portiere que nos junaba disimuladamente desde el dintel de la puerta. Debió de satisfacerle nuestra piadosa actitud (mira que no moverse del banco con aquel esplendor rodeándonos..., soltanto per pregare...). Lo cierto es que me sonrió en la distancia y yo, por corresponderle, junté las manos y puse los ojos en blanco mirando las maravillosas bóvedas de crucería. Ojos así -pensaría- sólo se ven en los cuadros de Rivera o en los de El Greco.
Sí, aún quedaba algún español devoto.
Pero, ya digo: mereció la pena este poco honorable acto de hipocresía, pues me permitió ver el Duomo de Siena. Y de eso se trataba.
Salute.
Hace veintitantos años que estuve, nos suelo recordar demasiados detalles del interior de tantas iglesias como en esta vida he visitado (no para orar, vive dios), pero esas columnas bicolores y sobre todo ese pavimento, no se me ha borrado de mi maltrecha memoria, por algo sera. Tal vez no hicisteis la visita que os hubiera gustado, pero esa casualidad la hizo especial. Salute caro.
EliminarDesde luego una fiesta por todo lo alto.
ResponderEliminarHas sabido mostrar el tumulto y el ambiente de la calle y la plaza en todo su esplendor.
Un lugar para tener en cuenta y una fiesta para no olvidar.
Un abrazo
Es dificil que las fotos lo transmitan, Luis, pero fue una experiencia inolvidable para nosotros. Abrazos.
EliminarExquisito y variado foto-reportaje. Un abrazo, David.
ResponderEliminarBracias Carlos, amigo. Abrazos.
EliminarLa primera fotografía es, cuando menos, muy original y me gusta, entre otras cosas por lo que tiene de transgresora. El resto de reportaje lo he leído en su conjunto y me ha gustado el modo en que después de la turbamulta lo vas serenando progresivamente hasta la calma que representa esa dama de verde. Un abrazo,
ResponderEliminarGracias por tu analisis siempre enriquecedor, Miguel. Abrazos, amigo.
EliminarOtra de las ciudades que tengo in mente visitar en cuanto pueda. Italia entera bien valen varias misas, verdad? Dicho con amor a nuestro ateo amigo, que me tiene del todo abandonada. La fiesta, terroríficamente fantástica. Y las fotos espléndidas, como siempre. Besos, querido.
ResponderEliminarNuestro amigo es esa rara avis que aparece y desaparece anarquicamente, libre, y que su imprevisibilidad es su atractivo. En cuanto a Italia vale mucho, pero ¿varias misas? mucho me pedís. Dejemoslo en una misa cantada. Y la fiesta aun no ha acabado, ya veras. Un besazo, amiga mia.
EliminarTras unos dias de auséncia, intento ponerme a marchas forzadas al dia.
ResponderEliminarIncreibles y maravillosos los reportajes toscanos nos estas mostrando.
Este último sobre la fiesta del Palio es difícil de describir si no lo has vivido en directo como tu. Seguiré atento a las próximas visitas.
Una abraçada
Hombre Josep, se te echaba de menos por estos pagos. Espero que hayas pasado unos agradables dias y vengas cargado de cosas que enseñarnos. Una abraçada, amic.
EliminarUna fiesta multitudinaria que has recogido tanto en unas buenas tomas generales como en otras mucho mas cercanas y personales.
ResponderEliminarEnhorabuena, David.
Seguro que lo pasasteis en grande.
Un abrazo.
Fue emocionante sin duda, e inolvidable para nosotros. Abrazos.
EliminarEstic flipant! Quin treball fotogràfic!!!
ResponderEliminarJo ahí m'havera ofegat...estava a tope!!!
Si...ja sé que no són hores de comentar...les 4 de la matinada, però és que m'he fet un té després de sopar i no hi ha manera!
I també estic tota la setmana en una perreria que no m'aguante...serà la edat...
;)
De vegades un poc de perreria no va mal, eh? tambe en tenim dret. Sera la calor. Un beset. ;)
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