Nunca he visto una iglesia tan bella en lo externo que resulte tan anodina por dentro como esta Santa Maria del Fiore; ni siquiera ver la enorme cúpula suspendida a cien metros sobre la cabeza, pintada al fresco (y no toda) con una pesada formación de figuras (creo que es un Juicio Final...) consigue emocionar. Pero el exterior del Duomo..., qué prodigiosa taracea de mármoles polícromos... Se ve, David, que a ti también te cautivó la envoltura antes que el contenido, pues a él dedicas la mayor parte de las fotos. Esta catedral es como esos peazos de mujerón tan bien aparejadas que les perdonas que sean gangosas y hasta analfabetas funcionales porque te hechiza el diseño de la carrocería. Claro que te puede pasar lo que a Alonso, que mucho cavallino rosso y mucha carcasa de diseño pero casi no toca podio y se deja acoquinar por los feos Red Bull. Pero con el Duomo de Firenze no creo, basta con la fachada: lo más bello está en la calle y sale a buscar al peregrino del mundo para que no pase de largo y se muera sin gozar del prodigio. Mi ejemplo de la ragazza despampanante, naturalmente que admite variantes e interpretaciones diversas: San Antón dicen que se enamoró de un burro y Alejandro de Hefestión. Salud, amigo.
Prueba de que coincidimos es que ni siquiera entramos en esta ocasión. La he visitado en dos ocasiones y no me dejo huella, eso me fue suficiente. Ni siquiera le aconseje a Josep que perdieran tiempo en entrar habiendo tantos sitios realmente bellos. Eso si, por fuera apenas tiene parangón. Salud, Fede.
Impresionante arquitectura; un trabajo de verdaderos artistas... Una nitidez fantástica en tus fotografías, ángulos precisos, y una composición bastante hermosa. Felicitaciones,David.
Le has sacado mucho partido. Cuando visité este lugar, entre el bullicio de gente, coches, y lo apretado que está todo me sentí bastante incomodo para hacer fotos, así que, salvo las típicas de recuerdo "aquí estuve" luego me dediqué a gozar del arte y a cuidar mis bolsillos de la nube de carteristas que por allí se mueve. Un abrazo.
Otro interesantísimo reportaje.
ResponderEliminarMuy buenas imágenes.
Gracias por compartirlas.
Un abrazo, David.
Gracias a vosotros por serme fieles. Un abrazo y buen fin de semana, Emiliano.
EliminarFascinats enquadraments David...
ResponderEliminarLa foto de l'ombra és una joia amic...
I seguim viatjant gràcies a tu...
Un bes!
Seguim el viatje i la companyia no pot ser mes agradable. ;)
EliminarExcelente!
ResponderEliminarOtra lección de arte magnífica.
Abrazos.
La que nos dieron aquellas gentes maravillosas. Un abrazo, amigo.
EliminarVayaaaa...estas son impresionantes.Que detalles !!
ResponderEliminarUn beso
Me alegra que te gusten, Laura. Un beso, guapa.
EliminarNunca he visto una iglesia tan bella en lo externo que resulte tan anodina por dentro como esta Santa Maria del Fiore; ni siquiera ver la enorme cúpula suspendida a cien metros sobre la cabeza, pintada al fresco (y no toda) con una pesada formación de figuras (creo que es un Juicio Final...) consigue emocionar. Pero el exterior del Duomo..., qué prodigiosa taracea de mármoles polícromos...
ResponderEliminarSe ve, David, que a ti también te cautivó la envoltura antes que el contenido, pues a él dedicas la mayor parte de las fotos.
Esta catedral es como esos peazos de mujerón tan bien aparejadas que les perdonas que sean gangosas y hasta analfabetas funcionales
porque te hechiza el diseño de la carrocería. Claro que te puede pasar lo que a Alonso, que mucho cavallino rosso y mucha carcasa de diseño pero casi no toca podio y se deja acoquinar por los feos Red Bull. Pero con el Duomo de Firenze no creo, basta con la fachada: lo más bello está en la calle y sale a buscar al peregrino del mundo para que no pase de largo y se muera sin gozar del prodigio.
Mi ejemplo de la ragazza despampanante, naturalmente que admite variantes e interpretaciones diversas: San Antón dicen que se enamoró de un burro y Alejandro de Hefestión.
Salud, amigo.
Prueba de que coincidimos es que ni siquiera entramos en esta ocasión. La he visitado en dos ocasiones y no me dejo huella, eso me fue suficiente. Ni siquiera le aconseje a Josep que perdieran tiempo en entrar habiendo tantos sitios realmente bellos. Eso si, por fuera apenas tiene parangón. Salud, Fede.
EliminarImpresionante arquitectura; un trabajo de verdaderos artistas...
ResponderEliminarUna nitidez fantástica en tus fotografías, ángulos precisos, y una composición bastante hermosa.
Felicitaciones,David.
Abrazo grande!
http://expresiongraficayverbal.blogspot.com/
Sin duda es de los edificios impresionantes que se nos ha dado contemplar. Un beso, amiga.
EliminarDavid yo lo vi tan majestuoso que era hasta difícil de fotografiar....Un abrazo amigo.-
ResponderEliminarhttp://visual-anjespinosa.blogspot.com.es/
Es muy dificil de fotografiar, al estar tan encajonada entre edificios es bastante imposible sacar partido a una foto de conjunto. Abrazos.
EliminarDelle foto molto belle, artistiche! Ciao
ResponderEliminarGrazie Erica, è il benvenuto a questo umile blog. Sentitevi a, come la vostra casa. Un saluto.
EliminarLe has sacado mucho partido. Cuando visité este lugar, entre el bullicio de gente, coches, y lo apretado que está todo me sentí bastante incomodo para hacer fotos, así que, salvo las típicas de recuerdo "aquí estuve" luego me dediqué a gozar del arte y a cuidar mis bolsillos de la nube de carteristas que por allí se mueve. Un abrazo.
ResponderEliminarSi, es uno de los sitios mas incomodo de Florencia y eso que ahora se ha restringido bastante el trafico, pero hace unos años...
EliminarRecuerdo que cuando caminaba hacia él el corazón latía desbocado.
ResponderEliminarEs una de las imagenes que se te queda en la memoria, aunque solo sea por su magnitud.
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