Bueno, Sinceramente creo que esta foto no la mejora ni Alfred Eisenstaedt. Perfectos el encuadre y sobre todo el momento que es lo que le da valor y asombro al mundo de la fotografía. Un 10.
Bueno, Sinceramente creo que esta foto no la mejora ni Alfred Eisenstaedt. Perfectos el encuadre y sobre todo el momento que es lo que le da valor y asombro al mundo de la fotografía. Un 10.
Maravilloso como has sabido captar el momento, al fraile no le haría gracia si la viera, pero para mi, es el personaje estelar de la misma. Otro abrazo.
Como los corsos de Asterix!
ResponderEliminarUna abraçada amic
Ja, ja. Una abraçada, Josep.
EliminarTres personajes a cuál de ellos más curioso y el de la derecha con un ropaje muy intrigante.
ResponderEliminarUn abrazo,
Un monje, Miguel. Abrazos.
EliminarLa iglesia como siempre dando la nota.. jajajaj Muy buena David.. Feliz semana amigo :)
ResponderEliminarJa, ja, es su condición. ;)
EliminarParece sacada en los años 60. Es total. Esta foto no tiene desperdicio. Un beso, David
ResponderEliminar;)
EliminarBrutal, no tiene desperdicio. Saludos
ResponderEliminarMe parece una foto sensacional
ResponderEliminarAbrazos!!!
Gracias, Javi. Un abrazo.
EliminarUn fotón, David !!!
ResponderEliminarLa anterior, con esa luz manchega tan especial, también me encanta.
Un abrazo.
Gracias, Emiliano. Un abrazo.
EliminarBueno, Sinceramente creo que esta foto no la mejora ni Alfred Eisenstaedt. Perfectos el encuadre y sobre todo el momento que es lo que le da valor y asombro al mundo de la fotografía. Un 10.
ResponderEliminarBueno, Sinceramente creo que esta foto no la mejora ni Alfred Eisenstaedt. Perfectos el encuadre y sobre todo el momento que es lo que le da valor y asombro al mundo de la fotografía. Un 10.
ResponderEliminarUf, eso son palabras mayores. :)
EliminarMaravilloso como has sabido captar el momento, al fraile no le haría gracia si la viera, pero para mi, es el personaje estelar de la misma.
ResponderEliminarOtro abrazo.
Ja, ja, si. Se le veía disfrutar paseando su anacrónica estampa entre los turistas sorprendidos. Abrazos, Manuel.
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