Molt bones les tres David. Vols creure que l'edifici de Generali (abans Banco Vitalicio) no l'he fotografiat mai?. Magnífic contrallum en la segona i un gran enquadrament en la tercera. La propera vegada que vinguis per Barcelona, a veure si quedem encara que sigui per a fer un cafè i ens coneixem "in person". Una abraçada
Cada día, cuando abro tu blog y miro las nuevas aportaciones, pienso: mañana cogeré mi cámara y saldré a hacer unas fotografías como estas. Me ocurre lo mismo que cuando lees un poema que te conmueve y piensas que podías haberlo escrito tú. A veces lo he intentado (hacer las fotos, digo) y no sabes los churros que me han salido. Cada día te tengo más manía. Te mando besos, porque soy buenísima
La noche del 20 de Octubre era calurosa (andaría la cosa por los 22º ), y estaba este trovador sentado en un banco de la Plaza de Catalunya. -al inicio del Paseo de Gracia- tomándose un helado de cucurucho (de "crema catalana", precisamente) en compañía de su curri -la Gacela de ojos glaucos- y sintió que el verano que ya daba por perdido volvía por sus fueros con las mejores galas. Fue como un regreso a un tiempo pasado que creía definitivamente perdido. Cierto que fueron unos día de una climatología excepcionalmente cálida -para la altura del año-, y ello permitió que paseáramos hasta altas horas de la noche por el barrio Gótico, que era un hervidero de guiris y demás tropa de caballería. No faltó una visita a "Els Quatre Gats" (eso fue por la mañana, a la hora del café) y, al anochecer, tomamos un te de manzana en el cafetín árabe " Salterio", preparado por las amorosas manos de Fátima, una saharaui que aún recuerda con pena los campos de refugiados del Tinduf. Nunca me gustó la Plaza de Catalunya; parece un puzzle de piezas desmañadas. Es grande y fea. Siempre paso de largo, o hacia Gracia, o hacia el Portal del Ángel, o la Rambla. Pero, claro, en estas fotos es el cielo lo que importa. Salud.
Como tu, tambien yo rehuyo esta plaza, no te sabria decir si alguna vez la crucé por enmedio, siempre la rodeo acelerando el paso,aunque me recuerde un dia ya muy lejano tomando una cerveza en el viejo cafe Zurich. Un lugar inhospito para los que no somos de alli. Y cuando paso, me entretengo mirando al cielo. ¿porque sera?
Molt bones les tres David. Vols creure que l'edifici de Generali (abans Banco Vitalicio) no l'he fotografiat mai?. Magnífic contrallum en la segona i un gran enquadrament en la tercera.
ResponderEliminarLa propera vegada que vinguis per Barcelona, a veure si quedem encara que sigui per a fer un cafè i ens coneixem "in person".
Una abraçada
M´encantara quedar amb tu i fer aquest cafenet. Queda compromes. Una abraçada amic.
EliminarCada día, cuando abro tu blog y miro las nuevas aportaciones, pienso: mañana cogeré mi cámara y saldré a hacer unas fotografías como estas. Me ocurre lo mismo que cuando lees un poema que te conmueve y piensas que podías haberlo escrito tú. A veces lo he intentado (hacer las fotos, digo) y no sabes los churros que me han salido. Cada día te tengo más manía. Te mando besos, porque soy buenísima
ResponderEliminarJa, ja, menos churros, amiguita. Seguro que no sera para tanto. Recojo tus besos y los duplico.
EliminarLos veo y te mando mil más. Como le espetó Guille a Mafalda "a mi a cadiñozo no me gana nadie".
EliminarJa, ja, ja, me planto.
EliminarLlegar aquí es recibir una belleza detrás de otra, un placer, siempre
ResponderEliminarBesos David.
Me alagas con tus comentarios, amiga.Un besazo.
EliminarUltimamente estas por las nubes ;-)
ResponderEliminarY no me extraña, con esos cielos !!!
Enhorabuena, David.
Un abrazo.
Querrás decir estoy en las nubes, ultimaménte y siempre, mis maestros ya me lo decían, je, je. Abrazos.
EliminarNice shot...love them!
ResponderEliminarThank you, friend. A greeting.
EliminarDestaco esos bellos cielos y las perspectivas logradas, David. Tus fotos son excepcionales, tienes mucho oficio, y siempre deslumbras,amigo.
ResponderEliminarAbrazo grande, y felicitaciones.
Me hinchais el ego y luego cojo peso. Gracias, guapisima. Un beso.
EliminarLa noche del 20 de Octubre era calurosa (andaría la cosa por los 22º ), y estaba este trovador sentado en un banco de la Plaza de Catalunya. -al inicio del Paseo de Gracia- tomándose un helado de cucurucho (de "crema catalana", precisamente) en compañía de su curri -la Gacela de ojos glaucos- y sintió que el verano que ya daba por perdido volvía por sus fueros con las mejores galas. Fue como un regreso a un tiempo pasado que creía definitivamente perdido.
ResponderEliminarCierto que fueron unos día de una climatología excepcionalmente cálida -para la altura del año-, y ello permitió que paseáramos hasta altas horas de la noche por el barrio Gótico, que era un hervidero de guiris y demás tropa de caballería. No faltó una visita a "Els Quatre Gats" (eso fue por la mañana, a la hora del café) y, al anochecer, tomamos un te de manzana en el cafetín árabe " Salterio", preparado por las amorosas manos de Fátima, una saharaui que aún recuerda con pena los campos de refugiados del Tinduf.
Nunca me gustó la Plaza de Catalunya; parece un puzzle de piezas desmañadas. Es grande y fea. Siempre paso de largo, o hacia Gracia, o hacia el Portal del Ángel, o la Rambla.
Pero, claro, en estas fotos es el cielo lo que importa.
Salud.
Como tu, tambien yo rehuyo esta plaza, no te sabria decir si alguna vez la crucé por enmedio, siempre la rodeo acelerando el paso,aunque me recuerde un dia ya muy lejano tomando una cerveza en el viejo cafe Zurich. Un lugar inhospito para los que no somos de alli. Y cuando paso, me entretengo mirando al cielo. ¿porque sera?
EliminarCualquier de las tres es estupenda con esos cielos, pero me quedo con la última:))
ResponderEliminarUn beso.
Gracias por tu amable comentario, Laura. Un beso.
EliminarMeravella de meravelles...
ResponderEliminarEs bonica Barcelona, eh?.
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