Lo engulló el hormigón blando del dique. Notó cómo el suelo cedía y que las piernas le quedaban trabadas en la pasta. Luego, un frío opresivo en la cintura, el olor a tierra tras la lluvia, la respiración entrecortada. Lo último que alcanzó a ver fue la estela de jet que iba a Mallorca. Una hora mas tarde, volvieron los peones al laburo y creyeron que un perro, o un borracho, o que un pescador de sepias mañanero, habría pisado el hormigón aun por fraguar. Con una llana alisaron la pasta aún manejable y solo dos años después se supo la tragedia. El ayuntamiento enlosó el tramo del suceso y colocó una cruz de mármol negro sobre la vertical del cuerpo sepultado. No creyó nadie que fuese oportuno rescatar los restos encofrados: al fin y al cabo es este país de muertos irredentos, a qué ese dispendio en tiempos de recortes.
Buen ByN David, magníficos los contrastes.
ResponderEliminarUn abrazo
LO malo de ti es que se me acaban las palabras para mencionar la belleza de la lírica de la realidad en la realidad.
ResponderEliminarMolt bon detall!
ResponderEliminarUna abraçada David
¿Vamos al agua o a misa?... Yo creo que al agua ¿ no?.. Un besazo Daavid :)
ResponderEliminarUs tirava de menys...
ResponderEliminarBon treball David!
Abraçades!
Has estado atento para captar la composición en triángulo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo engulló el hormigón blando del dique. Notó cómo el suelo cedía y que las piernas le quedaban trabadas en la pasta. Luego, un frío opresivo en la cintura, el olor a tierra tras la lluvia, la respiración entrecortada. Lo último que alcanzó a ver fue la estela de jet que iba a Mallorca.
ResponderEliminarUna hora mas tarde, volvieron los peones al laburo y creyeron que un perro, o un borracho, o que un pescador de sepias mañanero, habría pisado el hormigón aun por fraguar. Con una llana alisaron la pasta aún manejable y solo dos años después se supo la tragedia. El ayuntamiento enlosó el tramo del suceso y colocó una cruz de mármol negro sobre la vertical del cuerpo sepultado. No creyó nadie que fuese oportuno rescatar los restos encofrados: al fin y al cabo es este país de muertos irredentos, a qué ese dispendio en tiempos de recortes.
Algo me dice que es como si un tatuaje de alguno de los cuerpos se haya traspasado a suelo. Curioso. Me encanta.
ResponderEliminarUn abrazo, David.